Comprométete contigo mism@
Porque cuando logramos conectar con ese niño o niña, que vive dentro de nosotros, podemos solucionar conflictos internos que nos atormentan, sanar heridas que duelen y superar miedos que nos paralizan, descubrir las causas de nuestros temores, fobias y patrones de comportamiento tóxicos que algunas veces padecemos sin siquiera darnos cuenta.
Hagan esta introspección cada vez que quieran y ábranse a sanar ese niño o simplemente a visitarlo y escucharlo.
Nos estamos haciendo conscientes de lo que sentimos, reconociendo nuestras sensaciones y haciéndoles frente para curar nuestro interior.
EJERCICIO:
Visualiza que vuelas a través del tiempo y llegas a tu habitación, aquella donde pasaste muchos años de tu vida cuando eras niño.
Siente la temperatura, el olor y los sonidos de ese espacio.
Observas allí, a ese niño o niña sensible, tal vez algo imprudente, ingenu@, amoros@ y muy vital. Te acercas, te arrodillas frente a él/ella.
Pregúntale si le pasa algo, pregúntale que le hace falta, que le gustaría y que más quiere contarte. Escúchal@... Luego de escucharlo atentamente, puedes comprenderle, puedes protegerle, apoyarle… puedes tratarle como te hubiera gustado que te trataran…
Pídele perdón y reconcíliate con él/ella si es necesario.
Dile que, a partir de este momento estará a salvo, que lo/la cuidarás y aceptarás como se merece.
Prométele que siempre le prestarás atención y le dedicarás el tiempo para hacer lo que más le gusta, que lo/la escucharás y que harás lo necesario para sanar lo que tenga que sanar.
Dile que intente hacer una y mil veces las cosas que le gustan y que no se desanime si se equivoca.
Dile que la magia SI existe y que TODO es posible, si así lo crees.
Libéral@ del miedo y de las limitaciones y explícale que no sirven para nada. Dile que ya nunca más va a sentirse sol@ o abandonad@ porque tú estas con él/ella y Dios está eternamente, si así lo acepta...
Dile que es maravillos@, que es muy capaz y merecedor de lo más bonito de la vida.
Dile que él/ella es amor, abundancia, paz, inteligencia, creatividad y felicidad.
Abrázale muy fuerte… bésale, dale mucho amor, cariño y comprensión.
Ámal@ porque es inmens@ y poderos@, ámalo incondicionalmente porque él o ella eres tú mism@...
¿ Qué más podemos hacer para escuchar y conectar con nuestro niño/niña interior ?
Pasa tiempo con niños e inspírate con sus juegos y risas (o jugando con tus hijos, sobrinos, ahijados).
Viendo fotografías de la infancia
Volviendo a jugar los juegos de la niñez o experimentando nuevos juegos
Viendo películas infantiles
Escuchando y bailando música de la niñez
Dedicando tiempo para cuidar de ti
Brindándote mucho Amor…
“Solamente hay un adulto que puede darle al niño que fuimos aquello de lo que careció. Esa persona eres tú”
Tomado de los Círculos de sanación brindados en la Formación Zolemgeh Estrella.
