Conexión con la Tierra: Un Recordatorio de Amor Incondicional, Merecimiento y Abundancia
- Faumarili Estrella T
- 25 ago
- 3 Min. de lectura
En un mundo donde el ruido exterior muchas veces nos aleja de nuestra esencia, la Tierra sigue ahí… constante, viva, paciente. Ella no solo nos sostiene físicamente: también es un portal sagrado hacia el recuerdo de quienes realmente somos. Cada árbol, cada montaña, cada brisa es un susurro suave que nos dice: “Eres parte de mí. Eres merecedor. Eres abundante. Eres amor.”
Volver a Sentir la Tierra
Conectar con la Tierra es más que caminar descalzos sobre el pasto o abrazar un árbol (aunque estos actos, por sí solos, ya son medicina). Es volver a sentirnos parte de un todo más grande. Es reconocer que no estamos separados, que somos células dentro de un gran organismo vivo que respira, se mueve y crea junto a nosotros.
Esta conexión no es una fantasía espiritual: es una verdad ancestral que los pueblos originarios han sostenido desde siempre. Hoy, más que nunca, estamos siendo llamados a recordar esa sabiduría dormida en nuestras células.
Amor Incondicional que Sostiene
La Madre Tierra no nos exige perfección para ofrecernos sus frutos. No mide cuánto valemos antes de permitirnos respirar su aire o beber de sus aguas. Simplemente da. Sostiene. Abraza.
Este amor incondicional es el espejo que necesitamos para recordar cómo tratarnos a nosotros mismos. ¿Qué pasaría si nos miráramos con los mismos ojos que la Tierra nos mira? ¿Si dejáramos de exigirnos tanto y comenzáramos a aceptarnos como somos, justo aquí, justo ahora?
Amar incondicionalmente no es tarea fácil, sobre todo cuando hemos sido condicionados a buscar aprobación externa. Pero al reconectar con la Tierra, algo dentro de nosotros comienza a suavizarse. Sentimos que está bien ser humanos. Que está bien estar en proceso. Que está bien abrir el corazón.
El Merecimiento No se Gana, Se Reconoce
Una de las creencias más limitantes que arrastramos como humanidad es la idea de que debemos “ganarnos” el amor, la felicidad, la abundancia. Como si nuestra existencia no fuera suficiente para ser merecedores de todo lo bueno.
La Tierra, sin embargo, nos enseña otra cosa: todo ser vivo merece existir, crecer, florecer y recibir. No hay jerarquías en la naturaleza. No hay favoritismos. Hay equilibrio, sí, pero también hay generosidad.
Merecer no es algo que se consigue: es algo que se recuerda. Es un acto de profunda humildad aceptar que somos dignos simplemente por existir.
Abundancia en Todas las Formas
Cuando hablamos de abundancia, muchos piensan solo en riqueza material. Pero la verdadera abundancia es una energía que se expresa de mil maneras: en una risa compartida, en un amanecer, en un abrazo sincero, en una idea inspirada, en una cosecha, en un silencio pleno.
La Tierra no solo es abundante: es la manifestación misma de la abundancia universal. Y si somos parte de ella, esa abundancia también vive en nosotros. No tenemos que buscarla fuera, sino alinearnos con ella, desde la gratitud, desde la presencia.
Una mente en carencia no puede ver la belleza que la rodea. Pero una mente en conexión con la Tierra, enraizada en el amor y el merecimiento, empieza a percibir milagros en lo cotidiano.
Ritual Diario de Reconexión
Te invito a practicar este pequeño ritual cada día, para recordar tu conexión con la Tierra y tu merecimiento:
Sal al exterior, aunque sea por unos minutos. Si puedes, pisa descalzo.
Cierra los ojos, respira profundo, y siente el suelo bajo tus pies. Imagina que raíces suaves crecen desde ti hacia el corazón de la Tierra.
Lleva tus manos al corazón y repite internamente:“Soy parte de la Tierra. Soy sostenido. Soy amor. Soy merecedor. Soy abundante.”
Agradece. Escucha. Permanece en silencio unos instantes. Observa cómo cambia tu energía.
Somos Hijos del Planeta, No sus Dueños
Volver a conectar con la Tierra no es solo un acto espiritual, sino también un compromiso con la vida. Cuando entendemos que somos parte de ella —no superiores, no separados— florece en nosotros una nueva manera de vivir: más consciente, más respetuosa, más amorosa.
Y desde ese lugar, nace un mundo nuevo.
Que cada paso que des te acerque más a la Tierra, a tu corazón, y al recuerdo sagrado de que ya eres todo lo que estás buscando.
MZ Faumarili Estrella
Coach ANGELICAL de Vida
Terapeuta Sanaciones COSMICAS y Reiki KRYSTAL y CRISTICO
Ingeniero Industrial
Tlf.: 302 6013448








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